LA LUNA EN ACUARIO, Y MERCURIO EN CÁNCER RETRÓGRADO

La Luna está en quincuncio menguante a Mercurio retrógrado, con lo cual es difícil conectar con el tan necesario sentido común. Los pensamientos tienden a desconectarse de la realidad objetiva, y avanzar en dirección hacia los mundos inconscientes,  mientras que la Luna en Acuario necesita imperiosamente una imparcialidad fría e ideal, con un grado de abstracción que tiende a disociarse de tanto de lo subjetivo como de lo interior. Momentos difíciles para hacernos comprender y comprender a los otros, y muy proclive a los malos entendidos que puedan suscitarse por la combinación retrógrada y la poca afinidad entre el aire y el agua de los elementos en cuestión. No obstante, el quincuncio anuncia que es preciso hacer un esfuerzo mayor, para llegar a leer desde la lógica, aquello que tiene que ver con el lado ilógico y sensible de la vida. Al final del tránsito retrógrado, se podrá arribar a definiciones que contemplen tanto la objetividad como la subjetividad de un grupo de personas, que han establecido comunicaciones íntimas casi como una familia.