El ingreso de Venus al signo de Virgo cambia el panorama del amor y lo lleva del juego desprejuiciado y cálido del felino, a una metódica y práctica forma de mirar las relaciones. Virgo evaluará con su razonamiento deductivo, cuales son las ventajas y desventajas de una relación, confiando en que la misma se basa en dar y recibir, y que amor es servicio, humildad, y entrega. La perfección será un tema predominante, y se hará notar en todo lo que tenga que ver con lo estético y la belleza. Sin embargo, hay que tener en cuenta que llegar a la obsesión, puede ser nocivo incluso para la salud. Venus en Virgo es bastante crítica, y observará todos los detalles que desentonan con su concepto del amor, buscando defectos y resaltando virtudes, pero por sobre todo dejando en claro que el amor no es algo que se compra o se vende, o que depende de cantidades o magnitudes de expresión, sino de un justo equilibrio entre defectos y virtudes que ella sabrá diferenciar con sumo cuidado.
El amor a lo natural, al equilibrio ecológico, a los cosméticos de receta casera, y las mascarillas vegetales, son temas que puede disfrutar a pleno, puesto que para ella la belleza, jamás puede depender de lo artificial, ni de todo aquello que se derive de una afrenta a la naturaleza.
Discreción será su palabra favorita; haciendo de la sencillez, su templo.
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