VENUS Y NEPTUNO: APRENDIZAJES DE AMOR
Venus se opone a Neptuno y algo se diluye en nuestra relación: él o ella desaparece, está lejos, nos engaña, enferma o se nos hace de un modo u otro, inalcanzable. La dificultad de este momento indica que tenemos que volver sobre nuestros pasos y afrontar con cuanta idealización habíamos cargado a un@ compañer@ de carne y hueso. La perfección divina no se encarna en un ser lleno de defectos, con un cuerpo mortal y una forma de actuar que no siempre alcanzamos a comprender ni justificar. No obstante, este momento en el que la diosa del amor y el dios del mar se contactan, nos deja atisbar que existe un modo de amar que va más allá de los valores personales. Lo infinito del corazón humano, con su infinita capacidad de dolor y de gracia, se conoce en su grandeza cuando todo lo da y nada exige: ni fidelidad, ni exclusividad ni respuesta. Ese es el aprendizaje de este momento.
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