LA LUNA EN CÁNCER

Pasada la medianoche, el ingreso de la Luna en Cáncer implicará el fácil fluir de las energías de agua contactando con los planetas en Piscis que elevan la sensibilidad o en algunos casos, puede producir desbordes emocionales. 
Es factible que ante la complicación en el terreno de las actividades externas, busquemos refugio en la vida anímica. Estar doloridos o puestos contra una pared de imposibilidades (cuando contacte con Plutón), puede llevarnos a obtener contención y seguridad en el mundo más íntimo y conocido. 

La Luna en Cáncer nos pondrá en contacto con lo que anhelamos del pasado y muy posiblemente nos conecte con situaciones que se repiten para que salgamos de algún círculo vicioso. No obstante también puede aportarnos una sensación de protección que nos deja en condiciones de reconocer instintivamente cual es el mejor lugar donde guarecernos o "esconder" nuestros tesoros.

Tendencia a ahorrar dinero o a gastarlo en algo que implique al hogar, la patria o la familia.

Entradas populares de este blog

MARTE, PLUTÓN Y NEPTUNO

Antes y desués

Psicoastrologuía: Mercurio retrógrado febrero de 2020