EL INGRESO DE LA LUNA A TAURO

La Luna en Tauro traerá las reminiscencias que moran en el cuerpo y duermen esperando despertar.

Los perfumes, los olores de la casa, los silencios, la música, los colores, y todo lo que de placer a los sentidos, será lo que nos incentive a parar un poco el ritmo vertiginoso que traíamos hasta la Luna anterior, poniéndonos en sintonía con los ritmos naturales que conectan con el placer.

Un buen momento para decidir siestas, o sentarnos simplemente a ver un paisaje verde como terapia para los sentidos. La gran empatía con la tierra y la naturaleza, puede conducirnos a hallar remedios para las dolencias del alma.

Un buen paisaje, olor a césped, a flores, las caricias y la lentitud, serán aliadas para disfrutarlo todo en "cámara lenta". 

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