LA LUNA Y MARTE
Por un lado, esto brinda confianza y fe en las compañías, en la existencia de la justa retribución y por ende, agranda el sentimiento de que a toda acción, le corresponde si es buena, una retribución proporcional.
Sin embargo, Marte, -que de justo no tiene nada y de ególatra todo-, pincha el globo de las creencias y desafía ese sentimiento que interesado en equilibrar acción y reacción, inclinará ahora los platillos a la acción individual y utilitaria.
La amabilidad y la bondadosa ecuanimidad de unos, se verá atropellada por la unidireccionalidad de otros. Los negocios pueden interferir en relaciones que debieran ser de igualdad y el logro de objetivos puede crear un estado similar al de "la ley del más fuerte".
Un día como para evitar discusiones ideológicas debido a que algunos expresarán un verticalismo absoluto, en tanto que otros creerán que lo único a lo que se debe tender es a la igualdad. La lucha por la igualdad se puede dar en cualquiera de sus formas,
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