INGRESA LA LUNA AL SIGNO DE LEO
La Luna ingresa a Leo y se nos viene el fin de semana.
En la Casa natural del Sol, la Luna sufre una metamorfosis que la hace pasar de la postura de la nena de mamá, a gata sobre el tejado; así que todo aquello que se asemeje a un escenario, estrado, púlpito, tablón, exposición, cúpula, podio, el vip del boliche o el salón de las luces, será lugar privilegiado en la agenda lunar.
La tendencia es en general, a la fiesta y a la diversión, siempre y cuando seamos nosotros el centro.
Nada mejor para levantar el ánimo que sentirse el o la a-dorad@ de alguien que nos admire, sin contar con el deseo de que ese ser embelesado por nuestro brillo, nos mueva la cola y nos ande detrás.
Con este panorama, lo más seguro es que encontremos al el mejor candidato para este juego: el perro, ya que con tanto narcisismo, lo más seguro es que no deseen tanto aplaudirnos como enviarnos a terapia.
Es una de esas noches en las que si no hay plan para salir, esta Luna emana unos efluvios similares a los de un león herido: como puede ser!. Como puedo estar así de sola!, yoooooooooo!, justo yo!!!!, -gritará arañando al espejo-.
Sin embargo, si el acorde leonino resuena en su mejor afinación, no estará mal ponerse manos a la obra para terminar algo que creamos, jugar con los niños, armar una fiesta privada en casa aunque seamos los únicos pero especiales invitados al pijama party con el mejor pijama que sería bueno estrenar.
Usar algo nuevo, siempre es un homenaje para esta Luna.
En la Casa natural del Sol, la Luna sufre una metamorfosis que la hace pasar de la postura de la nena de mamá, a gata sobre el tejado; así que todo aquello que se asemeje a un escenario, estrado, púlpito, tablón, exposición, cúpula, podio, el vip del boliche o el salón de las luces, será lugar privilegiado en la agenda lunar.
La tendencia es en general, a la fiesta y a la diversión, siempre y cuando seamos nosotros el centro.
Nada mejor para levantar el ánimo que sentirse el o la a-dorad@ de alguien que nos admire, sin contar con el deseo de que ese ser embelesado por nuestro brillo, nos mueva la cola y nos ande detrás.
Con este panorama, lo más seguro es que encontremos al el mejor candidato para este juego: el perro, ya que con tanto narcisismo, lo más seguro es que no deseen tanto aplaudirnos como enviarnos a terapia.
Es una de esas noches en las que si no hay plan para salir, esta Luna emana unos efluvios similares a los de un león herido: como puede ser!. Como puedo estar así de sola!, yoooooooooo!, justo yo!!!!, -gritará arañando al espejo-.
Sin embargo, si el acorde leonino resuena en su mejor afinación, no estará mal ponerse manos a la obra para terminar algo que creamos, jugar con los niños, armar una fiesta privada en casa aunque seamos los únicos pero especiales invitados al pijama party con el mejor pijama que sería bueno estrenar.
Usar algo nuevo, siempre es un homenaje para esta Luna.
Comentarios
Publicar un comentario