LA LUNA, NEPTUNO Y LOS NODOS.

La Luna en Virgo contacta con el Nodo Norte y se coloca en oposición a Neptuno que a su vez, conjunta al Nodo Sur.

Es un momento en el que tenemos que colocar el acento en aquello que nos resulta práctico y una parte pequeña pero necesaria en el buen desempeño del cotidiano vivir. El diagramar el día de un modo sensato, prestar atención al propio cuerpo y evitar perdernos en la fantasía, nos conecta con la Tierra y nos hace apoyar los pies en ella para no pasar el día soñando con lo que "hubiese sido si".

El mundo de lo improbable puede transformarse en una molestia por parte de aquellas personas que viviendo un fuerte tránsito de Neptuno, parecieran  no tener límites a la hora de demandar nuestra atención.

Por lo tanto, la contraindicación  viene por parte del Nodo Sur o Cola de dragón, avisándonos que podemos ser muy compasivos pero equivocar el punto. Creyendo que es comprendiendo como podemos solucionar algo, solo veremos aumentar de tamaño a las olas.

A través de gente que tiene problemas con sus emociones o su salud, podemos vernos forzados nadar en contra de la corriente para escapar de su intrusión o sus quejas. Ellas traccionarán de nosotros de un modo difícil de sostener, motivo por el cual nos volveremos esquivos y huidizos cosa de no quedar atrapados o ahogados.

No es un momento de claridad, quienes se nos acercan están confundidos o nos confunden. Mejor que pase la Luna y en un par de días, tomar decisiones habiendo alcanzado una orilla y no en medio de un mar de emociones.

Comentarios

Entradas populares de este blog

MARTE, PLUTÓN Y NEPTUNO

Antes y desués

Psicoastrologuía: Mercurio retrógrado febrero de 2020