EN CASA DE HERRERO, CUCHILLO DE PALO. (o en casa de Astrologa, Mercurio de adorno)

Antes de salir de viaje, hice una predicción que a continuación encontrarás haciendo click en este ENLACE 

Resulta ser que mi marido y yo, teníamos que recorrer unos cuantos kilómetros. 800 para ser exactos. 

Las largas distancias se encuentran bajo la regencia de Júpiter que en el cielo del 27, se relacionaba con la Luna en Sagitario, significadora entre otras cosas, de largos caminos en familia o visitas a familiares que viven lejos.  

Como a Júpiter se le opone Urano y lo cuadra Plutón con un Mercurio retrógrado, era obvio que no era el momento propicio como para iniciar un viaje y aventurarnos a la ruta. Sin embargo, el motivo que nos llevaba a tomar el riesgo, era el conocer a mi nieto, festejar su cumpleaños y  asistir a su bautismo. (otra vez Júpiter, otra vez la Luna en Sagitario).

Con esa perspectiva, decidimos como siempre presentar batalla, no resistencia, basada en la convicción de que el destino no se manifiesta de un solo modo, -fijo y calculado-, sino que se presenta con un mensaje que al final de la retrogradación, tendré que descifrar.

De nada hubiese servido evitar el viaje, ya que al igual que los planetas en el cielo, no deberíamos ni podríamos detener nuestro tránsito por la vida como ellos no se salen de sus órbitas para evitar a Saturno. "Como es arriba, es abajo", no es simplemente una máxima. Es el reflejo de lo que sucede en lo cotidiano y  es el modelo que debiéramos tomar en cuenta al momento de pensar en astrología. La predicción no evita ni elude: explica mucho mejor la ruta y le da sentido.

Todos sabemos que el mito del dios alado, cuenta que en un momento dado Mercurio robó los bueyes del dios Apolo y para evitar ser descubierto, se calzó las sandalias al revés simulando un retroceso.

Como si fuésemos títeres de una decisión invisible, el auto se paró de golpe (Urano/Saturno|), nos dejó sin poder avanzar, sin agua, parados, sin una sola casa alrededor (Luna/Saturno) y con escasa batería en los celulares, alcanzamos a pedir auxilio. Por suerte,  -Júpiter siempre da una manito allí donde participa-, en ese tramo de la ruta había señal . Dicho sea de paso, en vez de vender 4G, sería mejor que la comunicación fuese comunicación. De nada sirve el mejor celular cuando en el país no ponen ninguna antena donde más se necesitan. (Anuncio de Mercurio retrógrado).  

Estuvimos 6 horas  esperando el remolque, y en esa larga espera, la perra, -que llevamos con nosotros-, se portó como entendiendo que no había otra que desensillar hasta que fuera oportuno. 

Mercurio retrógrado hace que nos comuniquemos  con nuestro entorno de un modo muy distinto del habitual y por supuesto, el entendimiento va de inconsciente a inconsciente, sin palabras y recorriendo la mente a modo de un sueño. Las imágenes son las que se hacen presentes y nos dejan claro que es lo que no se puede forzar. Pocas palabras, pocas explicaciones y poca batería en el celular. 

Entre silencio y silencio, mi marido dijo:  la falla mecánica es grave. Y en silencio y para mis adentros, -otra vez en una dirección interna y no externa-, pensé: si supieras que Plutón está en este baile, entendrías que esta detención llevará al reemplazo total de alguna parte del motor . Pero me callé y quizá se entere si lee este artículo.  (Plutón/Mercurio Rx/Sol).

El resultado de todo este entrevero que continuó pero se haría muy largo de detallar, lleva a pensar que habiendo ocurrido esto a mitad del viaje retrógrado, -y justo a mitad de nuestro viaje-,  queda mucho más por retrogradar, revisar, reparar, recapitular y reinterpretar.

Recién en enero termina este período de re-visión y también queda que me saque la tierra de las zapatillas que Mercurio, en el térreo Capricornio, nos legó pidiendo que veamos que es lo que hay que descartar por inútil.

Será hasta la próxima, si Mercurio quiere!