VENUS Y MARTE: SOÑAR POR UN RATO
Hay que destacar que quien es más "fuerte" o está mejor emplazado en el Signo de los Peces es Afrodita, cuya cualidades se expanden más allá de los límites que solemos poner o nos colocan los demás al catalogar al amor en medidas, tipo de belleza, clase social o todas esas condiciones que se imponen como requisitos para amar. En Piscis, Venus suele amarlo todo en el mejor de los casos, aunque también puede enamorarse de un ideal.
Marte en cambio no rinde sus mejores frutos aquí y puede ser o muy promiscuo, poco claro e indefinido, cualidades que no son típicamente marcianas. No obstante, en materia sexual, no evitará nada y le "entrará" a todo. Así que es de esperar que se den encuentros sexuales de todo tipo y color, ya que el tornasol es el color más afín al Signo de Piscis.
Para quienes vivan más de acuerdo al elemento Aire, puede ser un contacto inquietante porque las mareas emocionales y extáticas ponen algo nerviosa a la gente más racional. No es fácil dejarse llevar por las olas cuando uno pretende ir por un camino más lógico que el delirante mundo emocional.
Lo recomendable es que no creamos que en este momento todo inicio es definitivo, porque cuando cambie la luz, cambe la corriente o cambien los sueños, el príncipe o la princesa se volverán a ver de tamaño natural y carentes de magia.. y eso puede desilusionarnos.
El amor bajo las aguas piscianas, es como los sueños: pasa cuando se abren los ojos o subimos a la superficie. Por ello, cuide idealizar en exceso a su pareja, no olvide que después de los sueños, hay que despertar. Disfrute, pero conserve una cuerda que le ate a la realidad.
Comentarios
Publicar un comentario