EL CUARTO MENGUANTE DE LA LUNA

El ingreso del Sol al Signo de Tauro quedó acompañado por el Cuarto menguante de la Luna en Acuario.

Digamos que no es la mejor Luna para un momento en el que nos predisponemos a buscar cierta quietud, previsibilidad y sostén en cosas duraderas. La Luna acuariana es imprevisible y amante del "no sé lo que va a pasar y me gusta",  en tanto que el Sol taurino pone el ojo, el foco y la confianza en lo que ya fué comprobado por expertos y llevado a la práctica por gente que certificó que eso funciona. Si es posible, el certificado que sea por escrito.

En fin, los cuartos crecientes anuncian tironeos que podrían graficarse en una pareja en la cual uno de los miembros se ve desbordado por situaciones que se salen de control, -sacádolo de control a él mismo-,  mientras el otro se enoja por su conducta imprevisible y el quiebre de una rutina que lo deja tranquilo.

Quien tenga en su Carta Natal más componentes del elemento Tierra o saturninos, (proclives a la seguridad), acutarán el papel del enojado por creer que el otro parece un loco al que no se sabe que bicho le picó, en cambio el que se alinee mejor con el Aire uraniano, se saturará pronto de que el día tenga que llevarse de acuerdo a un determinado plan. A donde está escrito eso, después de todo?.

Haga lo que pueda: pero sobre todo trate de entender que no es un día para las fáciles coincidencias.

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