VENUS REINGRESÓ AL SIGNO DE ARIES

Venus volvió al Signo de Aries, sitio en donde digamos que no se siente lo más cómoda que se puede sentir, siendo un  planeta que gusta armonizar entre dos personas pero en Aries encuentra energía para que solo una tenga la definición de lo que es el amor.

Ya ha cumplido su ciclo retrógrado y ha revisado bastantes actitudes egoístas  propias o ajenas, así como también su característico modo de mirar el mundo amoroso con esa forma un poco policial de encarar las relaciones: si yo te quiero, tienes que quererme pero no viceversa. En ese sentido, no es muy justa que digamos cuando se despliega bajo la energía ariana.

No obstante, puede ser una entusiasta promotora del juego sexual y de esos encuentros que surgen a partir de una chispa. El único problema, -que no es menor-, es que esas chispas pueden no terminar muy bien cuando tenga que volver a toparse con Plutón y con Urano.

Es un mes en donde el incremento de la violencia de género puede dejarnos con la sensación de que hasta el amor entre la gente se está acabando. Grietas, asesinatos, agresiones de cualquier tipo, ponen a Venus, -el mutuo entendimiento-, en un lugar incómodo.

Su mejor costado será la sinceridad y frontalidad, pero algunas veces ir tan de frente, trae problemas. Sal de toda relación que tenga algún atisbo de "dominación". El tránsito por Aries puede darte mucho coraje y valentía.

Si mientras transita por el Signo del guerrero no hace contactos tensos con tus propios planetas, no te pasará nada extremo, pero si tienes ocupados los Signos de Cáncer, Libra o Capricornio... hay más posibilidades de que arda Troya en algún sentido.

Por lo demás, es un período para hacer nuevas amistades y vínculos. Energizar las viejas relaciones para concluirlas y lanzarnos a lo novedoso. También puede que no dejemos atrás a nadie, pero no caben dudas de que la conquista estará a la orden del día.