EL INGRESO DE LA LUNA EN VIRGO

Por la mañana estaremos ya con Luna en Virgo, lo cual implica la necesidad de introducir  cambios y hacer eficiente cualquier tipo de organización, ya sea por la necesidad de ordenar el trabajo, hacer eficiente el desarrollo de cualquier rutina y sentir sobre todo, que con nuestra minuciosidad, contribuimos a mantener un ambiente o modo "limpio" de hacer las cosas.

En ese caso, Virgo es también bastante afecto a cumplir el orden de los ritmos circadianos: no puede dormir de día y vivir de noche, -salvo indicaciones que contraríen la propia Carta Natal- siendo el Signo que pregona el famoso dicho de que "al que madruga, dios lo ayuda".

Tendremos un par de día para volvernos ritualistas: todo se convierte en un rito sagrado: la limpieza, la observación de una manchita y el modo de dejar todo en condiciones en las que no se necesita más que aprender y perfeccionar lo que ya se ha creado.

Como es una Luna apta para encontrar contradicciones, allí donde vea una, pondrá la lupa. Ni qué decir si las oye.

Virgo no confía en la gente que habla mucho y variado. Prefiere la gente específica y que sabe mucho de un tema. Si hay que solucionar algo, pues entonces llame al especialista o vaya al médico que realmente esté capacitado para atenderle. La Luna está a su favor.

Pase las viejas libretas a las nuevas, haga una nueva agenda aprovechando que Mercurio está por empezar a quitar de su camino lo que ya no tiene utilidad y disfrute del olor del desinfectante.

Evite las críticas destructivas y solo hable si tiene algo que enseñar para hacer más fácil la vida. 

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