LLEGA LA LUNA AL SIGNO DE VIRGO

Saquen la lupa, apunten a la mancha invisible y LIMPIEN!.

Cambiar de una Luna de fuego y autocentrada como la Luna en Leo para arribar al paraíso del desinfectante y arrodillarse al suelo y limpiar, suele ser un golpe duro pero necesario si es que vamos a registrar que agrandarse demasiado conlleva una posterior lección de humildad.

En este caso, las experiencias que vamos a registrar, pueden que nos suenen a críticas, -si es que estamos demasiado identificados con nuestro honor, prestigio y brillo-, puede que nos ayuden a mejorar, -si lo tomamos constructivamente-, y puede que nos patine, si hemos ido lo suficiente al analista como para no ser ni Leo ni Virgo, ni super ni pequeños.

Durante dos días y horas se nos brinda la posibilidad de volvernos minuciosos bobos que se andan fijando en detalles sin sentido, o convertirnos en detectores de incongruencias. Creer que por limpiar mejor una manija vamos a ser mejores personas, es realmente tonto, pero saber que un lugar, un cuerpo o un mundo ordenado, con respeto por los ritmos naturales y las pequeñas criaturas es algo que ayuda a mantenernos "limpios" de alma, es un canto a esta Virgen Zodiacal.

Aprenda algo, mejore, póngale onda!. Servir no es ser servil, sino cumplir con lo que cada uno debe para entre todos, generar espacios físicos de pureza anímica.

Comentarios

Entradas populares de este blog

MARTE, PLUTÓN Y NEPTUNO

Antes y desués

Psicoastrologuía: Mercurio retrógrado febrero de 2020