URANO, MERCURIO Y EL CERCENADOR PLUTÓN.
Urano y Mercurio intensifican nuestros radares mentales y rompen con las barreras del sonido, sobre todo en personas que ya tengan al dios del Cielo y al dios alado en contacto en su Carta Natal.
Lo que pensamos o se nos aparece disparado como una idea, parece ser de corte premonitorio o tan poco llamativo o desconectado, que pasamos de largo por encontrarse adelantado al tiempo que nos lleva entender que el entendimiento suele adelantarse el momento de su comprensión real. No es eso lo que le sucede a los genios?. Quien los puede entender?. Más bien parecen locos que hablan solos o parecen decir incoherencias, hasta que pasadas décadas o centurias, -o quizá un instante en el que una persona se atreve a salir de las formas comunes de interpretar los signos de la vida-, dan la razón a este adelantado,
Sin dudas se nos pasarán miles de señales cargadas de revelaciónes, pero serán pocos los que puedan "captarlas" en un santiamén.
Por lo demás, es excelente para romper con esquemas comunicativos y lanzarnos a tener una nueva mirada sobre asuntos o muy viejos o muy nuevos, así como también escuchar a gente que nos parezca original, incluso aunque sea ignota. Eso sí: su costado más incómodo es tener que explicar cosas a aquellos que parecen entender lo contrario o seguir caminos lógicos que aburren, están trillados o ya no ofrecen resultados.
Por "accidente" puede que escuches o te enteres de algo que encenderá tu fuego o corte con tu tranquila serenidad, que el vecino toque música a las 3 de la mañana, que tu ex te salga con un martes 13 o que te pierdas al tomar una calle nueva. Todo esto te preparar para tener que aceptar que no es malo errar, sino no entender que es supuestamente errando, como se encuentran cosas nuevas.
Las diferencias de opinión serán un tema que estará allí, en nuestras narices. Pero hoy nos importa poco la coincidencia y nos alienta la pluralidad: muchas voces son mejores que una, aunque es posible que llegados a Plutón, se quiera imponer una versión única,.
Cuidado: sé inteligente: habla cuando tengas que hablar, pero observa siempre!
Lo que pensamos o se nos aparece disparado como una idea, parece ser de corte premonitorio o tan poco llamativo o desconectado, que pasamos de largo por encontrarse adelantado al tiempo que nos lleva entender que el entendimiento suele adelantarse el momento de su comprensión real. No es eso lo que le sucede a los genios?. Quien los puede entender?. Más bien parecen locos que hablan solos o parecen decir incoherencias, hasta que pasadas décadas o centurias, -o quizá un instante en el que una persona se atreve a salir de las formas comunes de interpretar los signos de la vida-, dan la razón a este adelantado,
Sin dudas se nos pasarán miles de señales cargadas de revelaciónes, pero serán pocos los que puedan "captarlas" en un santiamén.
Por lo demás, es excelente para romper con esquemas comunicativos y lanzarnos a tener una nueva mirada sobre asuntos o muy viejos o muy nuevos, así como también escuchar a gente que nos parezca original, incluso aunque sea ignota. Eso sí: su costado más incómodo es tener que explicar cosas a aquellos que parecen entender lo contrario o seguir caminos lógicos que aburren, están trillados o ya no ofrecen resultados.
Por "accidente" puede que escuches o te enteres de algo que encenderá tu fuego o corte con tu tranquila serenidad, que el vecino toque música a las 3 de la mañana, que tu ex te salga con un martes 13 o que te pierdas al tomar una calle nueva. Todo esto te preparar para tener que aceptar que no es malo errar, sino no entender que es supuestamente errando, como se encuentran cosas nuevas.
Las diferencias de opinión serán un tema que estará allí, en nuestras narices. Pero hoy nos importa poco la coincidencia y nos alienta la pluralidad: muchas voces son mejores que una, aunque es posible que llegados a Plutón, se quiera imponer una versión única,.
Cuidado: sé inteligente: habla cuando tengas que hablar, pero observa siempre!
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