LA LUNA, PARTICIPA DE UN NUEVO RECTÁNGULO MÍSTICO

Saturno, Luna, Urano y Júpiter, forman una alineación que promete varios sacudones y varias vías de solución.

Entre los conflictos, se subrayan la oposición Luna/Saturno, que nos hace sentir por inteligentes en materia filosófica, poco capaces de hacer un buen análisis asociativo que indique una amplia visión de las cosas o demasiado volátiles para concentrar energía mental en un tema que exija más que una mirada pasatista del asunto.

Probablemente alguien nos cumpla el papel saturnino, señalando con el dedo índice en alto nuestras falencias y si no es así, podríamos ser nosotros los que nos cansemos de argumentos pobres, demasiado generales y con poca o ninguna idea original.

La solución a esto la prometen el próximo sextil de Luna/Urano y un poco de Júpiter para Saturno, añadiendo un modo original de dar vuelta los pensamientos habituales y un poco de trabajo para adquirir conocimiento superior.

Por otra parte, la otra oposición participante de este Rectángulo, es la de Júpiter versus Urano que puede originar una visión demasiado adelantada a la propia época y gracias a esto, falta de comprensión o directamente, un trato  algo voltaico que no nos deje muy cómodos en el papel de maestro ciruela.

La solución a esto se propone a través de nutrir el buen ánimo y tener salidas humorísticas. Tomar a risa o con cierta superficialidad lo que nos dicen otros, teniendo en cuenta que por experiencia, hay personas que necesitan comprobantes ante las intuiciones y una mayor cantidad de tiempo para entender lo que por ahora, parece ser una locura.

Las personas con Luna o algún factor acentuado en Géminis o en Signos como Virgo, Piscis o Sagitario, así como las que tienen aspectos fuertes con Saturno por tránsito o natal, estarán más tentadas a preguntar tonteras, a ser más superfluas y a comportarse como niños de jardín, creyendo que basta con su locuacidad como para ser considerados inteligentes. En el fondo, la inseguridad les duele y buscan descollar por su intelecto, tan solo para recibir un mimo y sentirse "segur@s de sí mismos". Hacerse conscientes de que nuestra sed de re-concomiento intelectual es en el fondo temor a algún fantasma que nos queda de un pasado, nos puede servir para no deprimirnos si nadie nos muestra afecto a través del aplauso a nuestra capacidad mental.

Bien aprovechada esta energía, -y sin que se estanque por cuestiones emocionales-, es excelente para aprender cosas nuevas, encontrar nuevos caminos, nuevos caminos y conocimiento. Las discusiones pueden zanjarse si es mayor la inteligencia emocional que la lógica y la experiencia y sensatez mayor que la capacidad analítica, -por ahora recursos de lógica ausente gracias a la retrogradación de Mercurio por el Signo de Virgo-.


Comentarios

Entradas populares de este blog

MARTE, PLUTÓN Y NEPTUNO

Antes y desués

Psicoastrologuía: Mercurio retrógrado febrero de 2020