LUNA Y MERCURIO: BLA, BLA, BLA...
De alguna manera, se nos cruzan los cables y hasta podemos confundirnos y marearnos al punto de desconocer el origen de la confusión o el mal entendido.
También puede que tengamos que corregir nuestra forma de entablar diálogo con los demás: palabras, pensamientos e información, puede ser dada a quien no nos escucha y en ese caso, habrá que pensar por qué le hablamos a los quien no desea escucharnos. También podría ser que seamos nosotros los reacios a absorber más información de la que hasta ahora, nos cabe en la cabeza.
Ud., habla lo justo? o con tal de parecer simpátic@, responde con un discurso florido pero vacío?.
Responder estas preguntas, nos dejará un poco más claro saber por qué y para qué hablamos: si por no sentirnos solos, si porque realmente necesitamos comunicar algo o para divertirnos un rato. Nada de esto conduce a ningún lugar, salvo a tapar con palabras lo que se siente. Comience a notar a donde se contradice Ud. o donde otros le quitan tiempo haciendo con sus palabras, un bollo para criticar o volver las palabras en su contra.
Personas que hablan mucho y dicen poco, que inflan las palabras, que juegan al juego del mártir o el salvador, están por aparecer en el horizonte trayéndonos algunos dolores de cabeza.
No obstante, no es la única forma en que todo puede suceder: es muy factible que empecemos a tomar nota de manera incompleta de todo lo que nos pasa, a escuchar algunas cosas y filtrar otras y sacar conclusiones equivocadas. Sin embargo, como la Luna seguirá avanzando y contactará con Urano, una chispa puede ayudarnos a despertar de la confusión. Tome estos dos días para estar alerta a temas que quizá necesite reordenar en un tiempo no muy lejano.
No gaste tiempo al divino botón para que le escuche quien no desea saber de verdad lo que Ud. tiene para decir.
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