URANO, PLUTÓN Y MARTE.

Marte, Urano y Plutón están formando una configuración tensa que tiene un margen de acción perdurable por varios días más y vigente desde hace otros. Esto quiere decir, no que los problemas terminan cuando esos planetas se separan y deshacen la configuración, sino que se siembran en ese tiempo y se desarrollan mientras avanzan hasta la próxima vez que entran en contacto una y otra vez hasta agotarlo, resolverlo y tramitarlo. No hay, -antes de que me pregunten hasta cuando estos planetas van a estar en contacto-, solución que venga sin la intervención y el trabajo humano. Y más que el trabajo, LA CONSCIENCIA de que el problema existe.

Entre otros acontecimientos, las luchas de poder y la guerra desatada a partir de la implosión, -Plutón/Marte-, ya sea del submarino, en los vínculos, en crisis de cualquier tipo y tamaño-, serán temas que desatarán cortocircuitos simbólicos o literales, guerras simbólicas o literales, todo con el patrocinio plutoniano de querer enterrarlo aunque las manos salgan por debajo de la tierra,

En este doble movimiento de enterrar y ocultar, estaremos este mes.

Esta alineación no se limita a lo que hoy se conoce del Ara San Juan, ya que puede haber muchas situaciones que puedan describirse como "hundidas" a causa de choques constantes y violentos, cortos y que producen un súbito envenenamiento.

El fuego que un cortocircuito despierte, será sofocado a través de métodos plutonianos: cubrirlo todo con el escudo bruñido que se le dió a Ares para poder terminar con la Hidra. A un atisbo de violencia,  a una chispa, suele seguirle una cantidad de reacciones imprevistas  o información, que dejen al desnudo o entierren muchas cosas relativas a la autoridad, su uso y abuso.