LA LUNA EN ESCORPIO POR EL ATARDECER
Del incremento de actividad sobre todo de ayer y de las primeras horas del día de hoy, iremos frenando el diálogo con el otro para entrar en un silencio observador, una actitud indagadora, suspicaz y bastante desconfiada.
La Luna en Escorpio sabe que nada es lo que parece y anda con el radar para detectar la cara miserable de todo, hasta de aquello que ya no la tiene pero conviene estar alerta por si algún instinto se suelta y se retuerce gracias a algún recuerdo que nos lleve al infierno; de esos que todos tenemos escondido en el alma y que busca redención.
Es la Luna que mejor soporta los momentos difíciles, pero también es la que los provoca porque no puede vivir sin un poco, -algunas veces bastante-, de drama o caos.
Los sentimientos se vuelven profundos y algunas veces de tan profundos, indetectables. Pero es excelente para la indagación a niveles a donde no solemos llegar. Hija del Hades, reacciona como un cirujano: extirpa aquello que le cayó mal, abraza por siempre lo que le vino bien y sobre todo, conoce bien lo que es la fusión de almas: si no es como ella quiere, será como ella quiere.
Si te encuentras con su espejo en algún lugar, no te asustes. No hay nada que le dé más poder que el que le teman.
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