NOTICAS ASTROLÓGICAS Y PSICOASTROLOGUÍA PARA LOS ERRORES DE TRADUCCIÓN DE LA REALIDAD

Mientras Mercurio, -nuestra mente, palabras, formas de deducir y sobre todo de TRADUCIR lo que el otro nos dice o lo que decimos nosotros-, se toma el tiempo de salir de los nudos que causan las diferencias en los puntos de vista causadas por hablar y pensar demasiado rápido sin detenernos a cumplir con ciertos pasos previos que impone Saturno, -el tiempo, la experiencia, la cautela que Mercurio en Aries no tiene y la madurez-, se van dando una serie de intercambiso que vienen siendo hace alrededor de dos meses, bastante problemáticos.

No hay forma de solucionar algunas cosas si no es tomando la cualidad de no tener pelos  no tanto en la lengua, sino en el modo de pensar las cosas. No se puede decir cualquier cosa (Mercurio en Aries), sin pagar una consecuencia (Saturno en Capricornio).

Es factible que el impulso que sale de un largo período de intentar tolerar en vano una gran cantidad de desacuerdos, explote en el lugar menos pensado. Y con MENOS PENSADO, me refiero a la restricción que hace Saturno de un pensamiento "cuadrado" y corto de miras.

Se piensa poco y se habla mucho, sobre todo en estos días de Luna en Sagitario, afín a Mercurio en Aries. Y es que el elemento empuja a desembuchar lo primero que se le ocurre en tanto que Saturno obliga a que no sea así. Saturno hace que las personas maduremos a través de algo que sentimos como "disciplinario", pero que en el fondo tiene que ver con la responsabilidad y el respeto que merece la experiencia.

El diablo saber por diablo pero más sabe por viejo. Y lo viejo en este caso, es lo que se ha aprendido de un modo práctico, real y esforzado.

La razón del conflicto es que uno cree poder decir todo sin freno y el otro cree que puede frenarlo todo. Es como que alguien te pregunte algo y después te pide que no contestes.  En ese acto se refleja un problema decir-no decir que se puede estar jugando como una duda interna con alguien en posición de jefe o lider (Capricornio/Aries), pero que por temor de abrir la boca y por bronca de tener que cerrarla, derivamos la discusión con alguien que no tiene nada que ver en el asunto.

Es así como vemos por la calle a la gente haciendo y diciendo cosas que si se detienen dos segundos a pensar, pueden ver como "fuera de lugar, de tiempo y de causa".

Mientras esté la Luna en Sagitario, se puede tener la intención de filosofar y encontrar el sentido y el para qué de lo que sucede. Pero cuando cambie a Capricornio, algo puede terminar de cortarse. Ese corte quizá sea algo que necesitemos. Solo esté atento al cuchillo que usa y con quien lo usa.