NOTICIAS ASTROLÓGICAS Y PSICOASTROLOGUÍA PARA UN DÍA DE LUNA-SATURNO
Hoy es un día en el cual topamos con ciertos obstáculos ya que la Luna se topa con Saturno en el Signo de Capricornio.
Antes este contacto planetario podemos hacer futurología y adivinar que nos puede pasar, pero en el fondo, el significado es personal para cada persona, ya que no en vano, cada persona tiene una Carta Natal diferente y esa diferencia implica a su vez diferentes formas de reaccionar frente a una pared, límte, fin o todo lo que puedan decir los recetarios astrológicos de lo que significa Luna Saturno.
Algunos optarán por tirarse a llorar frente a la muralla gris del impedimento o la pena saturnina que en este caso afecta a las emociones: nos ponemos como niños abandonados que claman al cielo un
POR QUÉ A MIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII!.
Otros se esforzarán el doble, el triple o el cuádruple sin importar descanso, sin tomar en cuenta sus necesidades más que la de obtener lo que se han propuesto. Esto puede llevar a exacerbar el sentimiento de ir solo contra el frío de un pico nevado que se ve cada vez más lejos y uno anda sin siquiera un sobretodo.
El tema Natal de otros, indicará que es mejor no hacer nada y "esperar a que pasen los planetas", perdiéndose el aprendizaje de "lo que hubiera sido si"... hubieran elegido por una actitud activa y productiva, antes que de cómoda rendición.
Algunos más se darán cuenta de que "quedarse solos" frente al problema y la incomprensión del otro, les da fortaleza para seguir adelante en una tormenta de nieve. El carácter se templa y se adquieren a un quizá alto costo, temple y fortaleza para saber que no siempre la vida nos tiene por qué sonreir.
De todas las posibilidades, este último es el que saca la mayor ventaja a los otros. Comprender que las carencias, las imposibilidades y los obstáculos, -ya sea que se manifiesten como falta de trabajo, muerte, desolación, soledad, trabas, depre o lo que fuese-, pueden enseñarnos a crear respuestas válidas frente a lo que se siente como un callejón sin más salida que uno mismo, es con el tiempo, -Saturno mediante-, algo que atesoraremos como se atesora todo lo que cuesta mucho.
Sin dudas, un duelo, -otra posiblidad del contacto- o una pérdida, también nos refrescan la corta memoria de que la vida no es eterna. Todo tiene un fin. Y el fin al que debemos asistir, contiene el potencial de despegarnos de lo que ya no tiene utilidad, incluyendo en algunos casos, el cuerpo físico, ideas que hemos sostenido como únicas o cualquier cosa que hayamos utilizado o nos haya servido como respaldo emocional, económico o social.
Antes este contacto planetario podemos hacer futurología y adivinar que nos puede pasar, pero en el fondo, el significado es personal para cada persona, ya que no en vano, cada persona tiene una Carta Natal diferente y esa diferencia implica a su vez diferentes formas de reaccionar frente a una pared, límte, fin o todo lo que puedan decir los recetarios astrológicos de lo que significa Luna Saturno.
Algunos optarán por tirarse a llorar frente a la muralla gris del impedimento o la pena saturnina que en este caso afecta a las emociones: nos ponemos como niños abandonados que claman al cielo un
POR QUÉ A MIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII!.
Otros se esforzarán el doble, el triple o el cuádruple sin importar descanso, sin tomar en cuenta sus necesidades más que la de obtener lo que se han propuesto. Esto puede llevar a exacerbar el sentimiento de ir solo contra el frío de un pico nevado que se ve cada vez más lejos y uno anda sin siquiera un sobretodo.
El tema Natal de otros, indicará que es mejor no hacer nada y "esperar a que pasen los planetas", perdiéndose el aprendizaje de "lo que hubiera sido si"... hubieran elegido por una actitud activa y productiva, antes que de cómoda rendición.
Algunos más se darán cuenta de que "quedarse solos" frente al problema y la incomprensión del otro, les da fortaleza para seguir adelante en una tormenta de nieve. El carácter se templa y se adquieren a un quizá alto costo, temple y fortaleza para saber que no siempre la vida nos tiene por qué sonreir.
De todas las posibilidades, este último es el que saca la mayor ventaja a los otros. Comprender que las carencias, las imposibilidades y los obstáculos, -ya sea que se manifiesten como falta de trabajo, muerte, desolación, soledad, trabas, depre o lo que fuese-, pueden enseñarnos a crear respuestas válidas frente a lo que se siente como un callejón sin más salida que uno mismo, es con el tiempo, -Saturno mediante-, algo que atesoraremos como se atesora todo lo que cuesta mucho.
Sin dudas, un duelo, -otra posiblidad del contacto- o una pérdida, también nos refrescan la corta memoria de que la vida no es eterna. Todo tiene un fin. Y el fin al que debemos asistir, contiene el potencial de despegarnos de lo que ya no tiene utilidad, incluyendo en algunos casos, el cuerpo físico, ideas que hemos sostenido como únicas o cualquier cosa que hayamos utilizado o nos haya servido como respaldo emocional, económico o social.
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