LAS ENERGÍAS DEL NOVILUNIO, VENUS Y PLUTÓN
La alineación entre Venus, Neptuno y Plutón, -agregando que la Luna Nueva se suma a la tensión con el dios del Hades-, es señal de personas capaces de dañar de un modo ultrajante a los demás, consecuentemente, hay quienes temen el poder de esas personas a las cuales se les atribuye el "mal deseo" o actitud envidiosa que por algo detectamos nosotros. Es común en muchos sitios escuchar hablar de la palabra "daño", lo cual en algunos casos, se propaga a través de la creencia de que hay que pinchar un sapo para hacer llegar veneno o dolor a quien nos causa una sensación de inferioridad irreversible. Pero en este caso es más que eso: el potente tóxico que emana y es capaz de quitar toda la inocencia de quien está desprevenido, tiene también el poder de transformar, regenerar y convertir en salvación algo que de otro modo, hubiese quedado como simple trauma. No hay nada más poderoso que algo que está reprimido, sobre todo, los sentimientos que Luna-Plutón generará